jueves, 2 de abril de 2009

Antecedentes de los candidatos

A pocos meses de comenzar la ronda de elecciones en Uruguay, llama la atención la poca información con que contamos sobre los candidatos.

En Uruguay estamos acostumbrados a que los periodistas le hagan el juego a los candidatos, dejando que se explayen sobre lo que piensan hacer o que defenestren a sus rivales a gusto, pero no se ve que se investigue sobre su pasado, sus antecedentes, su situación actual, etc.

En Estados Unidos quizá sean muy extremos en esto, pero consideran que tener el conocimiento completo sobre el candidato es un derecho del ciudadano y en ese sentido toda investigación que se haga, por intrusiva que parezca, se justifica.

De esta forma, los candidatos saben que están expuestos a que cualquier cosa sobre su pasado pueda salir a la luz, ya sea una infracción por conducir ebrio, un problema médico ocurrido hace muchos años, problemas familiares, algún juicio o demanda pendiente, etc.
Suena cruel que alguien vea su vida expuesta de esa forma, pero se considera que hay un bien superior a preservar, que es el derecho a la información.

Para evitar problemas, los partidos políticos hacen un cuidadoso rastreo (screening) de los posibles candidatos, asegurando que los elegidos estén lo más limpios posibles.

¡Qué lejano parece todo esto!
En Uruguay la prensa prácticamente no investiga nada sobre los candidatos y los ciudadanos no parecen preocupados por saber, entonces tampoco los partidos políticos se preocupan en su selección. Si estuviéramos en Estados Unidos, los actuales precandidatos tendrían que aparecer todos los días en Fox News o CNN intentando dar alguna explicación…


Todos sabemos que José Mujica fue guerrillero tupamaro y fue uno de los líderes de ese movimiento, por lo que tuvo participación activa en todo lo ocurrido en los años 60 y parte de los 70, ¿pero cuál fue exactamente su participación? ¿Directamente empuñó un arma? ¿Ejecutó alguno de los asesinatos? ¿Plantó alguna de las bombas? ¿Mandó cometer algún crimen?

Por otro lado, en tiempos recientes tuvo un problema de salud muy grande, que él mismo reconoció pero no trascendieron los detalles. ¿Qué problema fue? ¿Está totalmente recuperado? ¿Tiene algún otro problema grave?

En un candidato que tuvo una vida particularmente agitada, tiene actualmente 74 años y terminaría su eventual mandato con casi 81, es totalmente legítimo hacerse esas preguntas para saber si efectivamente está en condiciones de asumir una responsabilidad así.

¿Se terminaron de investigar los vínculos de Danilo Astori con Juan Carlos Bengoa? ¿Y los negocios de su hijo, que varias veces se mencionaron pero nunca se aclararon del todo?
Pasando al Partido Nacional, ¿están totalmente aclaradas las denuncias de corrupción contra Luis Alberto Lacalle y algunos de sus colaboradores? ¿Ocurrió algo tras aquella denuncia que hizo Juan Andrés Ramírez en televisión?
¿Cómo es el estado de sus finanzas? ¿Dónde se originó su fortuna?

¿Cómo es la situación familiar de Jorge Larrañaga? ¿Qué fue de aquella acusación de que golpeaba a su esposa? ¿Y se sabe algo más de aquel subsidio por desempleo cobrado mientras hacía campaña?


Este artículo no pretende reavivar viejas denuncias (que además no están confirmadas, al menos hasta donde yo sé) sino expresar una preocupación por el desamparo que tenemos como ciudadanos cuando no se nos proporciona información profunda sobre los candidatos.
Posiblemente sea cierto que todos tenemos algún fantasma en el ropero, pero tratándose de gente que podría adquirir la máxima responsabilidad en el país, tenemos derecho a conocer cuáles son los suyos.

2 comentarios:

  1. Sabés que tenés razón, no? Pero mi pregunta es: dónde podemos conseguir información sobre ellos?
    Acabo de leer el libro de Sanguinetti sobre lo ocurrido entre 1963 y 1973 y la verdad es que volvieron a mi memoria un montón de hechos que tenía bloqueados... la participación tan directa de Mujica en los hechos relacionados con copamientos, juicios sumarios, ejecuciones, secuestros y los etc que se nos ocurran, son alarmantes.
    No digo que la gente no pueda cambiar, obviamente. Pero hay hechos irreversibles que - aunque uno cambie de parecer o de forma de actuar - quedarán para siempre marcados en un calendario que se escribió con sangre... sangre de dos bandos, también es justo decirlo.
    Saludos,

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  2. Yo me pregunto lo mismo: ¿dónde conseguimos esa información?
    El tema es que por eso le reclamo a la prensa que haga esa investigación (que además no debe ser tan difícil en Uruguay)
    Para un ciudadano normal es muy difícil -o directamente imposible- acceder a esa información, pero yo creo que la prensa debería tener otros medios y presionar de otra forma para conseguirla.

    Y lo del libro de Sanguinetti no es casual... ¡justamente yo estaba leyendo ese mismo libro cuando se me ocurrió escribir el post! :-)

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